Hace 8 años que vengo «trabajando» de otra forma. Ya sea como freelancer o con flexitime, los horarios de 9 a 5, vestirme con traje e ir a la oficina, por suerte, quedaron en el olvido.
Cuando empecé todo sonaba muy loco y la mayoría de mi familia no entendía qué hacía ni cómo podía «estar trabajando» si estaba ahí sentada con la computadora en el living. (Entre nos, creo que siguen sin entender pero ahora se acostumbraron 🙂
Volviendo al presente la modalidad de trabajo flexible ya no suena tan loca y muchos desde muchos lados la están implementando. Ahora, ¿estás preparado realmente para ello?
Antes de contarte mis aprendizajes y ver si estás listo para el «gran salto», vamos a definir algunos términos así todos nos entendemos mejor.
¿Qué es «teletrabajar«?
Se dice teletrabajo o trabajo 3.0 a la posibilidad de realizar tu trabajo desde otro lugar físico que no sea la «oficina». Puede que sea como empleado o como contratista o freelancer de una empresa. Pero si al menos algunos días en la semana y gracias a la ayuda de «Santa Internet» podés escaparte de la oficina y trabajar desde un bar o desde otro lado, ¡Felicitaciones! Ya estás teletrabajando.
¿Qué significa «Flexitime»?
Esto significa que podés hacer tu trabajo en horarios flexibles (ergo, en el horario que quieras) SIEMPRE y CUANDO cumplas con los objetivos. Para mi es el invento más grande después del helado y el lavarropas. Es sacarle presión a llegar a las 9 o a estar hasta que «se vaya el jefe» porque lo que tenés que hacer está atado a tus objetivos (y en general a cumplir un mínimo de horas). Y siempre y cuando cumplas, ahora lo podés hacer en TUS horarios, es decir empezando a las 10 am o porqué no a las 5 pm 🙂
Las políticas de flexitime cambian de acuerdo a cada empresa (algunas son bien flexibles, otras no tanto) pero ya da un aire y un manejo al trabajo que creo se necesitaba para seguir haciéndolo.
¿Qué es ser un trabajador freelance?
Este término lo escuché mucho al principio de mi carrera en áreas como diseño web o cualquier tipo de diseño. Ahora se usa para TODAS las áreas.
La idea es contratar a alguien para realizar una o varias tareas específicas con un monto pautado y un comienzo y final de tarea también. Es decir, no sos empleado de la empresa, sos un contratista, un profesional independiente que trabaja en función a un proyecto.
Hay una gran tendencia a contratar todo tipo de freelancers ya que es una situación «WIN-WIN» (todos ganamos 🙂 Esto quiere decir que a las empresas les permite ahorrar costos (por ejemplo las cargas sociales) y a las personas les permite ganar más libertad y autonomía.
Ahora para agregar emoción a todo esto, hace ya unos cuantos años que hay varias plataformas donde de forma muy fácil se puede contratar freelancers (y ser contratado). Entre ellas tenemos a Workana (en español), Upwork, Elance y muchas más.
Estas plataformas hicieron que todo el proceso se hiciera más rápido y seguro. En simple, ¿cómo funcionan?
Una persona postea un trabajo con lo que necesita, especifica tiempos y lo que está dispuesto a pagar. Los interesados se postulan y si se encuentra el indicado, hay match. El contratado se pone a trabajar y el cliente a esperar. La plataforma se encarga de velar porque el dinero del contratador exista y cuando se termina el contrato y todos están contentos se deposite en la cuenta del contratado. Así de fácil.
Si ya estás super emocionado y listo para tirarte de cabeza a este nuevo mundo del «teletrabajo», dejame antes compartir lo que aprendí en estos años… Para que te ayude a tener las expectativas claras y prepararte mucho mejor.
7 Consejos para empezar tu vida como Trabajador Freelance o Freelancer
1. Consigue tu primer trabajo (y review en la plataforma que elijas) pronto. Todas las plataformas tienen algun sistema de medición y de rankeo de profesionales. Tener ya un trabajo contratado te da más ventaja, más seguridad (ya conseguiste el primero, de seguro conseguirás más) y te ayudará a tener experiencia como profesional independiente. No te digo que agarres cualquier cosa pero si que estés dispuesto a bajar un poco tus estándares cuando decidas empezar para la primera vez.
2. Esto ES un trabajo. Despertarte a las 10, seguir en pijamas y ponerte a jugar a la play suena tentador pero no te va hacer llegar a ningún lado. Como freelancer puedo elegir trabajar unas horas hoy y terminar el resto a la noche, o pasarme un día sin trabajar sabiendo que al día siguiente estaré como ahora a las 1040 pm en la computadora. Esto es solo un ejemplo pero es importante que sepas que hay que trabajar, a tus tiempos, en tus horarios pero tenés que pasar tiempo haciendo tu trabajo (para tenerlo y generar más de él)
3. Tratar con Personas también es tu trabajo. Antes tenías a los compañeros de oficina que hablaban de miles de cosas que no te interesaban y tu jefe que solo ladraba todo el día. Ahora no está más eso pero están tus clientes, a los que tenés que entenderles, comunicarles bien y mantenerlos contentos (si lográs esos te asegurás trabajos recurrentes MUY fácil!). No creas que por ser «freelancer» estás solo en el mundo (puede que no veas a nadie cara a cara) pero seguirás tratando con personas.
4. Tené una rutina. Suena loco porque una de las principales ventajas de «teletrabajar» es que vos manejás tus tiempos pero mi consejo para no pasarte 20 horas enfrente de la computadora es que necesitás una rutina. Armala como más te guste y tené en cuenta tus horarios más productivos (los mios son a la mañana). Lo mejor es trabajar en baches de unas 2 – 3 horas, cortar un poco y seguir otras 3 horas más. (Estoy totalmente a favor de jornadas de 6 horas de trabajo y no soy la única loca).
5. No trabajes todo el tiempo. Esto nos pasa a todos a penas empezamos. Nos emocionamos, tenemos tiempo, queremos saber más, aplicar a más posiciones de trabajo, terminar más rapido y sin darnos cuenta no nos levantamos ni para lavarnos los dientes. No es bueno. El resultado es que terminás cansado, estresado y no podrás sostener esa rutina en el largo plazo. Si realmente te querés dedicar a trabajar de forma independiente y flexible tenés que tener una relación (y rutina) sana con tu trabajo.
6. No te aisles. Otra cosa que me pasó y muchas veces. Está bárbaro tener la oficina en casa pero después de un tiempo me di cuenta que solo hablaba con mis plantas (y me asusté cuando creí que me contestaban 🙂 Tratá de conectar con otras personas ya sea yendo a algún espacio de coworking, algún café o haciendo alguna actividad (relacionada o no con tu «teletrabajo») que te haga salir de tu casa y ver personas de carne y hueso. Aunque no me creas, se extrañan!
7. Administra bien. Este consejo final va para todo. Desde administrá bien tu tiempo hasta tus trabajos y tu dinero. Ser freelancer o profesional independiente no asegura ingresos fijos mensuales estables continuos todo el tiempo.
Puede pasar que unos meses estés sobrepasado de trabajo (y de ingresos) y que después quedes un poco a la «deriva». Aprendé a manejar tu dinero como para que no te agarre la ansiedad. Lo mejor en esos momentos de tranquilidad es pasar tiempo en tu perfil actualizandolo, seguir siendo aplicando y contestando consultas, aprender alguna nueva habilidad o herramienta para sumar conocimiento o recontactar a clientes viejos para retomar viejos lazos. No pierdas el ritmo ni la cabeza. Algo siempre surge.
Espero que estos consejos te hayan servido y que los compartas con quien los necesita.
Algunos recursos extras…
¿Qué opina Dilbert al respecto?
Mini infografía sobre Teletrabajadores: